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Nuevos requerimientos en el proyecto de interconexión eléctrica que unirá el Norte Grande y la zona Centro-Sur ha encendido la discusión entre las dos empresas que llevan adelante la iniciativa: la colombiana ISA y la Transmisora Eléctrica del Norte (TEN), propiedad de Engie Energía Chile y Red Eléctrica de España.
Ambas empresas están desarrollando una fracción de la línea de trasmisión que permitirá unir el Sistema Interconectado Central (SIC) con el sistema del Norte Grande (SING). En el caso de ISA, a través de su filial InterChile, construye una línea de 753 kilómetros en 500 kV y doble circuito que unirá la subestación eléctricas Cardones, al sur de Copiapó, y Polpaico, al norte de la Región Metropolitana, mientras que TEN avanza en una iniciativa para conectar la misma subestación en Copiapó con Mejillones.
Ambos proyectos están siendo concreados de forma independiente, pero coinciden en una parte: el punto de conexión, y sería precisamente en este espacio donde se estarían gestando discordia entre ambas compañías.
¿La razón? Inicialmente se tenía previsto la unión de ambos proyectos a través de un enlace con la actual subestación Cardones, sin embargo por petición del dueño de la subestación -Transelec- esto deberá ser modificado a una conexión aérea.
Según fuentes del sector, adecuaciones similares requerirían una inversión entre los seis y los ocho millones de dólares, pero aún no está claro quién deberá desembolsarlos; si ISA, TEN o ambos.
“Hay que hacer a inversiones adicionales en la conexión con ISA porque se va a hacer una conexión distinta a la que estaba prevista. Inicialmente nosotros llegábamos con una subestación GIS y nos conectábamos a la subestación de Nueva Cardones GIS, ahora se desechó esa alternativa y va a hacer una conexión aérea, que es más caro”, indicó el vicepresidente comercial de Engie Energía Chile -ex E-CL, propietaria del 50% del TEN-, Enzo Quezada, en el seminario oportunidades y desafíos de la interconexión SIC-SING, organizado por Revista Nueva Minería y Energía.
Consultado por qué empresa deberá financiar las modificaciones indicó: “Está en discusión con ellos (InterChile) porque forma parte del contrato de conexión. A nosotros nos gustaría que una parte la hagan ellos y otra nosotros, pero forma parte del convenio de conexión que hay que acordar”.
Consultada InterChile indicó que el contrato adjudicado se ve a ejecutar a cabalidad y que las obras de conexión están siendo coordinadas con TEN.
Se espera que dicha discusión sea zanjada en las próximas semanas, y su implementación se concrete en el corto plazo para que el cronograma de la muestra en marcha de la interconexión no se vea afectada, la que tiene como fecha enero de 2017.
Una vez en marcha la iniciativa se proyecta que la interconexión tendrá un efecto macroeconómico en el Producto Interno Bruto (PIB) de entre US$1.559 y US$1.718 millones, lo que equivale al 1,5 por ciento del PIB.
Fuente: Pulso www.chileenergias.cl